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lunes, 1 de octubre de 2012

Andando por Brisbane con transporte público


Así como en Argentina tenemos la SUBE, por Queensland tenemos la Translink Go Card .Se puede utilizar para micros, trenes, y catamaranes. Sale AUD 5, o sea, 5 dólares australianos, y se puede comprar el crédito que se desee por supuesto.

Sobre para la tarjeta

Para los adultos la Translink es azul



Con Peter dejamos el auto en el hotel, y decidimos caminar, y utilizar el tren y el citycat. Salvo por un par de taxis nocturnos, cumplimos con lo planeado. Tanto los trenes como los catamares son muy lindos, cómodos y limpios. Los trenes cuentan con vagones especiales donde se puede viajar sin ruidos molestos…Se los denomina “quiet carriages” y ahí no se escucha música fuerte, ni se grita por teléfono, ni se conversa de modo tal que quien está a cuatro metros puede escuchar cada palabra que emitimos. Aclaro, no es que no se pueda hablar, sino que son vagones tranquilos. Recordaba las quejas de tantos que viajan a diario en micro y deben soportar la música a todo volumen, y griterío…Si uno va o viene del trabajo, o del colegio o facultad, está bueno relajarse y contemplar el paisaje o leer, o sencillamente descansar.

El sistema de las tarjetas es así: al subir se apoya sobre el lector y al bajar se hace lo mismo, y de ese modo se registra el recorrido y por ende el monto a pagar. En  las estaciones de trenes están los viejos molinetes que todos conocemos, con la diferencia de que se “toca” el lector con la tarjeta. Al salir de la estación, se hace lo mismo. Viendo lo que fuimos gastando puedo decir que los viajes cortos son los más onerosos, si bien en ningún trayecto llegamos a los AUD 3.

Hay cruceritos para turistas por supuesto, pero, tomar el citycat es una buena opción para trasladarse y también para ir recorriendo el río. Si andás con bici, no hay ningún inconveniente para tomar el catamarán. Inclusive, afuera hay un lugar para poner las bicis, y de este modo los ciclistas se pueden sentar donde deseen y el resto no está incómodo con una bici encima.










Fotos © BettyOjeda

Brisbane,la bella 2 (Feliz cumpleaños con atraso)



Aprovechandoel feriado, más aún que  por estos lares no hay muchos,, ni existen los “puentes” (*) como en Argentina, salimos de paseo. Habíamos reservado una habitación en el Metro Hotel Tower Mill,  ubicado en una linda zona de Brisbane, muy cerca del CBD, o sea central business district o  central activities district , digamos, el corazón de la ciudad, el centro. El hotel, redondo, está frente al Wickham Park  , hermoso parque, donde ví dos “cosas” que no había vuelto a ver desde mi llegada  a Australia hace ya tres meses. Primera: hojas otoñales en el piso y la segunda, ¡jacarandás! Tanto las hojas como los jacarandás me hicieron recordar a la querida y bella ciudad de La Plata   (capital de la provincia de Buenos Aires) Si bien estamos en primavera, las hojas me recordaron el otoño. Justo frente al hotel  está el Old Windmill  o Viejo Molino de Viento  que data de 1820 y es el más antiguo de todo el país. El parque es hermoso, con una frondosa vegetación, bancos  rojos, esculturas en el camino, y al llegar del "otro lado", o sea Albert Street, uno se encuentra con más esculturas y un cartel que dice King Albert Park, o sea...otro nombre del lado de Albert Street..

Foto: Betty Ojeda


Foto: Betty Ojeda
Parque Wickham
Foto: Betty Ojeda


Parque Wickham
Foto: Betty Ojeda





¿Parque Wickham o Parque King Edward? 
Sobre la calle Edward.
Foto: Betty Ojeda




No sé cuándo fue construido el hotel, pero tiene un toque sesentoso. Como dije antes es redondo, lo que le da un toque particular. Nuestra habitación estaba en el sexto piso así que nuestra vista era bonita, y justo enfrente teníamos el molino. La habitación era pequeña y un tanto especial dada la forma del hotel. El baño bien equipado (shampoo, crema de afeitar, loción para el cuerpo, etc) pero con una extrañeza: las canillas de la ducha están afuera del cubículo. Raro…pero no era incómodo y creo que supieron aprovechar el poco espacio del baño.  Si bien la habitación era pequeña, estuvimos cómodos, y el balconcito con su mesa y sus sillas nos dio otro espacio para disfrutar de la vista compartiendo unas ricas cervezas. Dos cosas dos que no me parecieron bien: el estacionamiento no está incluido y si bien dentro de lo que mencionan como servicio figura Wi Fi, si querés conectarte tenés que pagar aparte. La verdad es que ese tipo de cosas me parecen de cuarta.


Llegamos, acomodamos nuestras cosas, y salimos a caminar. Como dije antes , el hotel está muy cerca del centro. Visitamos la Albert Street Uniting Church  que es una pequeña hermosa iglesia. Paseamos por el Queen Street Mall  del que les había hablado la primera vez que fuimos a Brisbane. Pusimos disfrutar de música en vivo en la calle porque aun estaba el festival . Hay muchos edificios antiguos, pero éste no lo había visto en el paseo anterior, y me llamó la atención. Se llama BrisbaneArcade  y data de 1923  Hay negocios, todos muy paquetes, la mayoría son joyerías así que si andan por el centro de Brisbane y quieren comprar un anillito con diamantes, pasen y vean.



Hermoso órgano en Albert Street Uniting Church
Foto: Betty Ojeda

Brisbane Arcade
Foto: Betty Ojeda


Cenamos en un restaurante Chino y finalmente probé el plato que tanto había buscado Peter en La Plata en los restaurantes chinos de allá, el famoso Sizzling Mongolian Lamb! Muy rico, aunque algo picante para mi gusto.



 

El feriado no fue el viernes, sino el lunes. Se preguntarán debido a qué, quizás. Pues, en el estado de Queensland y en Western Australia también, el 1º de octubre se festeja el cumpleaños de la reina, a Elizabeth II me refiero (Australia es parte del Commonwealth, traducido a veces como Mancomunidad de Naciones , si bien en general se utiliza el término en inglés) La reina nació el 21 de abril en realidad, así que es un festejo un tanto extraño. De cualquier modo, como si fuera abril el 1º de octubre, disfruté que tuviéramos tres días para compartir con Peter.

 





Feriado “puente” (*) Cuando el día feriado cae un martes por ejemplo, el lunes se decreta feriado para favorecer la industria del turismo. También para favorecer al turismo, se trasladan los feriados (ejemplo: si el día para festejar o conmemorar cae un miércoles, se pasa para el lunes.) Nunca entendí mucho esos festejos o conmemoraciones “cuando venga”, pero son parte de la cultura argentina desde hace muchos años…Tampoco me parecen bien los feriado puentes, y me cuesta entender cómo es que cuando los docentes vamos a  paro y los alumnos pierden un día de clase, están en grave peligro de convertirse en pobres criaturas ignorantes, y cuando pierden clases por los feriados inventados el monstruo de la ignorancia no los ataca. Por supuesto, coincida o no yo, no modificará nada. Cuando trabajaba igual disfrutaba del día de descanso, y ahora que estoy ya con los trámites jubilatorios, todos los días son feriados para mí, pero como el mundo es un poquito más amplio que mi propio barrio, sigo pensando lo mismo.