De parrillas y aves, entre otras cosas

Parrillas públicas

Algo que le ha llamado la atención a la mayoría de los amigos de Argentina, han sido las parrillas públicas. En principio porque …son públicas y están en tan buen estado, luego porque son eléctricas (en Argentina “se hace el fuego”, y se utiliza leña o carbón) La verdad es que son muy prácticas, y lindas.

Ayer fuimos al jardín botánico de Ashmore a disfrutar de una caminata. Por primera vez –para mí-  hicimos uso de una de las famosas parrillas. Hubo que limpiarla porque por supuesto, al estar al aire libre se ensucia, pero estaba cuidada. Luego de utilizarla, Peter la dejó reluciente, también a la mesada por supuesto. 

Desde que llegué a Australia he repetido varias veces: “es mi primera vez”. La fantástica fauna me sigue asombrando, y la flora también, aunque algunas de las plantas que me asombran y me gustan no son nativas. Siguiendo con “mi primera vez”,  ayer estuve junto a bambúes, y escuché el sonido tan particular que producen con el viento. Me acerque emocionada a sacarle fotos al grupo de bambués que estaban cerca de la parrilla que estábamos utilizando y le pedí a Peter que luego me sacara una foto. Poco después me enteré que el bambú crece por todos lados …casi-casi un yuyo, ji,ji. y así fue que en el mismo botánico habían varias plantaciones.

Bambú

Yo llamo a este país “birdland” porque es asombrosa la cantidad de pájaros que se ven. Dentro de todos los saberes que no tengo están los referidos a las especies animales, pero lo que observo acá es que se convive con gran cantidad de aves. Si estuviéramos en una zona rural, seguramente me llamarían la atención las aves diferentes pero no la cantidad, acá lo que suma sorpresa es que estamos en una ciudad y hay que tener cuidado de no pisar a alguna Ibis cuando se maneja por el centro. Tanto en el Jardín como en nuestra zona, hay muchísimos cuervos. También hay murciélagos, que quizás debido a la mala prensa que siempre han tenido, nunca me han gustado mucho, pero…hasta me están pareciendo interesantes cuando los veo ir de palmera en palmera al anochecer. Cerca no, por favor…

Foto:Betty Ojeda
Honeyeater (también llamado honey sucker)

Purple swamphen

Ibis (Threskiornis molucca )

Corvus coronoides

Volviendo al Jardín Botánico me resultó interesante el sector  “TheSensory Garden” donde se estimulan los sentidos.

En el Currumbin leí acerca del problema con la escasez  de árboles con huecos. Muchas aves hacen sus nidos ahí, y la tala por dar un ejemplo, ha hecho que hayan cada vez menos árboles viejos. En la reserva enseñaban cómo armar nidos artificiales para ayudar a las aves, y en el Jardín, ayer, pude ver uno. Simple, pero muy útil.

Resumiendo, el Jardín Botánico es un bello lugar para disfrutar al aire libre.