Estaba leyendo una
nota acerca de los locales que se alquilan para festejar cumpleaños de niños en
la ciudad de La Plata, y pensaba en varias cosas. Una es cómo me sigue llamando
la atención que todo esté pautado. En una oportunidad, en el cumpleaños de una
de las nenas de una amiga, nos miramos con ella y dijimos: ¿te acordás de nuestros
cumpleaños cuando éramos chicas, y… jugábamos? Lo espontaneo pareciera ser que está
pasadísimo de moda, y por lo general las fiestitas son clonadas…Ni hablar de
las de 15 años, donde lo original brilla por su ausencia, y las fiestas
calcadas salen una fortuna.
La cuestión es que
leyendo la nota del diario platense y se me ocurrió que
era hora de comentar algo que hace tiempo tenía ganas de compartir. Ya he
hablado varias veces acerca de los parque que hay, con sus parrillas gratuitas,
baños públicos aseados y provistos, y muchos de ellos, con sectores con juegos
para niños. En varias oportunidades hemos visto celebraciones de cumpleaños
infantiles en los parques, y me ha resultad fantástico. Los niños están al aire
libre, juegan libremente sin que nadie les indique cuándo saltar, aplaudir o lo
que fuere, y para las familias no es lo oneroso que es en La Plata. Por lo
general he visto que suman gazebos a los
que hay, y más mesas y sillas como es imaginable. También es cierto que el
clima en estas latitudes permite que este tipo de fiestitas se puedan realizar
durante todo el año porque nunca hace realmente frío.
Hace más de un año
que estoy acá, pero me sigue maravillando todo lo que se brinda a la
ciudadanía. Es cierto que la naturaleza ha sido muy generosa por esta zona,
pero ha habido también una decisión política de brindar a la comunidad espacios
de esparcimiento, cuidados, aseados, cómodos, y totalmente gratuitos. También
hay una respuesta positiva ya que la gente cuida todo lo comunitario.